Hoy el agua lleva tan poca fuerza,
que el río parece saber que va a morir al llegar al mar.
Yo lo contemplo buscando
el punto en que tú y yo desembocamos.
Hoy el viento ha quedado afónico para los demás,
aunque a mí siempre me silve tu nombre.
Hoy me quito yo la ropa al llegar a casa,
y al meterme en la cama he empezado a usar el pijama.
Ayer se vuelve una empresa de cobro a morosos,
y tú apareces vestido de frac.
Si apareces.
No hay comentarios:
Publicar un comentario