No me destroza que me llames 'puta'
pero sí que no me llames nada.
De hecho, prefiero ser para ti, puta,
zorra, víbora,
a no ser más que un nombre de mujer.
Eso sí que duele.
El problema de querer ser tu 'perfecta'
es que hay millones más perfectas que yo.
Que mientras agarro puñados de pañuelos
para que mientan sobre el tamaño de mis pechos
hay millones de pechos que tienen la erección por ley.
Si después de haber conocido montañas
te resistes a abandonar las dunas de mi torso,
voy a tener que anular el contrato
al sicario que persigue tus fotos.
Voy a tener que volver a beberme las noches de tu boca
y a dejar que te fumes de una calada mi respiración.
Voy a volver a poner como punto y final a los orgasmos mudos
el 'crack' de los dedos de mis pies
en la primera noche que me acompañes.
Voy a volver a necesitar espinarte la piel
con un golpe definitivo de cadera;
y a marcarle a mis labios
un camino de peregrinación por tu cuerpo.
Si después de haber conocido Adéles,
Charlottes, Clementines,
prefieres que siga siendo mi nombre,
sólo querré serlo si te sale de los ojos.
Hasta que vuelvas a no llamarme nada,
y yo pida tu suicidio definitivo en mi cabeza;
sin funeral, ni flores, ni nada.
''Qué difícil intentar salir ilesos de esta magia en que nos hallamos presos'' Joaquín Sabina.
3 de julio de 2012
17 de junio de 2012
Y una mierda 'para siempre'
Supongo que fue la distancia quien no supo querernos en la lejanía.
O todo lo contrario.
Que era demasiado pedir que recordases
la conjugación del verbo amar en primera persona del plural.
Que el amor que respirases por mi boca
dejase su sabor en tu lengua los suficientes días
para no perderte en la primera macedonia de lolas.
Supongo que no me esneñaron en ningún colegio
(y he estado en muchos) que disney miente más sobre el amor
que una mujer en sus orgasmos.
Tú tenías los míos regalados,
nos teníamos a ambos regalados,
no creo quenos mereciésemos te merecieses querernos tanto.
Parecías desnudar el infinito en mis pupilas
y alcanzar la eternidad con cada suspiro entre mis labios.
Siempre escuché que quien dice antes te quiero
sufre antes las cuchilladas del contrario.
Tampoco me enseñaron a desconfiar del dicho popular.
Y empezamos a coser tardes con el monopolio
de nuestra compañía, y parecía dolerte más que a mí
que la noche no tuviese más horas
para adiccionarte a hacerme dependiente.
Tiene gracia, que te conociesen por tu destreza en bolsa
y todas las acciones que invertimos en los dos
se devalorizasen por tu culpa,
y ahora sea yo la que mendiga limosna al olvido.
Porque pagaría, si tu inexistencia en mi memoria
fuese adquirible con dinero.
Pagaría si el amor fuese un virus con vacuna,
si no fuese amor de esta forma.
Amor en que el sexo sólo es masturbación con compañía
amor en que la dignidad de uno se lo juega todo
a un farol emocional de strip-póker.
Lo que sí aprendí en la escuela
fue que los niños dejaban de insultarte si no te ofendías;
así que me puse el uniforme de indiferencia
pero me salió tatuado el de odio.
La materia solo se transforma, dicen;
yo debo estar hecha de toda la jodida tabla periódica,
cuando no me salen otra cosa que sustitutos
donde otro día quise todo lo que tenía que ver contigo.
Y lo hubiese seguido haciendo,
hubiese llegado a la cima del Everest contigo
de la montaña rusa más alta del mundo
o de donde tú me pidieses.
Pero no me pediste nada.
Ni vas a volver a pedirme algo.
Ni puedo seguir imaginando cómo evitar
el odio incondicional de tus padres.
Ni puedo seguir inventando tus regalos de cumpleaños.
Ni puedo seguir perdiendo el tiempo pensando
de qué formas arrancarle a tu desenfreno
un 'te necesito'en nuestras camas.
Sólo puedo seguir amando lo que fuimos,
y odiarte por cargarte lo que hoy, ahora,
sería un primer algo con tus besos.
O todo lo contrario.
Que era demasiado pedir que recordases
la conjugación del verbo amar en primera persona del plural.
Que el amor que respirases por mi boca
dejase su sabor en tu lengua los suficientes días
para no perderte en la primera macedonia de lolas.
Supongo que no me esneñaron en ningún colegio
(y he estado en muchos) que disney miente más sobre el amor
que una mujer en sus orgasmos.
Tú tenías los míos regalados,
nos teníamos a ambos regalados,
no creo que
Parecías desnudar el infinito en mis pupilas
y alcanzar la eternidad con cada suspiro entre mis labios.
Siempre escuché que quien dice antes te quiero
sufre antes las cuchilladas del contrario.
Tampoco me enseñaron a desconfiar del dicho popular.
Y empezamos a coser tardes con el monopolio
de nuestra compañía, y parecía dolerte más que a mí
que la noche no tuviese más horas
para adiccionarte a hacerme dependiente.
Tiene gracia, que te conociesen por tu destreza en bolsa
y todas las acciones que invertimos en los dos
se devalorizasen por tu culpa,
y ahora sea yo la que mendiga limosna al olvido.
Porque pagaría, si tu inexistencia en mi memoria
fuese adquirible con dinero.
Pagaría si el amor fuese un virus con vacuna,
si no fuese amor de esta forma.
Amor en que el sexo sólo es masturbación con compañía
amor en que la dignidad de uno se lo juega todo
a un farol emocional de strip-póker.
Lo que sí aprendí en la escuela
fue que los niños dejaban de insultarte si no te ofendías;
así que me puse el uniforme de indiferencia
pero me salió tatuado el de odio.
La materia solo se transforma, dicen;
yo debo estar hecha de toda la jodida tabla periódica,
cuando no me salen otra cosa que sustitutos
donde otro día quise todo lo que tenía que ver contigo.
Y lo hubiese seguido haciendo,
hubiese llegado a la cima del Everest contigo
de la montaña rusa más alta del mundo
o de donde tú me pidieses.
Pero no me pediste nada.
Ni vas a volver a pedirme algo.
Ni puedo seguir imaginando cómo evitar
el odio incondicional de tus padres.
Ni puedo seguir inventando tus regalos de cumpleaños.
Ni puedo seguir perdiendo el tiempo pensando
de qué formas arrancarle a tu desenfreno
un 'te necesito'en nuestras camas.
Sólo puedo seguir amando lo que fuimos,
y odiarte por cargarte lo que hoy, ahora,
sería un primer algo con tus besos.
4 de junio de 2012
Por hacernos daño
Alba no se viste de sonrisas caducadas
al fondo de una almohada que nos gane en la calvicie.
Alba no se cobra las horas por deber,
lo hace por adicción a malgastarlas con una colonia
que a su razón le hace las veces de cloroformo.
Alba no escapa de la jaula para sentir la libertad
siente la verdadera libertad entre rejas
con un columpio para dos periquitos en el centro.
Alba no paga deudas, se excita contrayéndolas,
si las paga es porque la moneda de cambio
bursatiliza en la bolsa del sexo.
Tampoco llora por ella, si en ella
no entras tú como unidad.
No es infiel a las cosquillas en la cama,
ni a los zumos de naranja en la cocina
y el sol de las 11 lamiendo sus piernas desnudas
que tu camiseta ancha dejan al deseo
mientras su deseo te lame entero con la mirada.
Dios sabe que si está casada con algo,
es con la tapa del retrete subida
o con renunciar a uno de los lados de la cama.
Y yo, que soy más libre cada día
y me dedico a abrazar la ausencia de una compañía
que me despierte con besos en la nuca,
ni soy Alba, ni quiero volver a serlo jamás.
al fondo de una almohada que nos gane en la calvicie.
Alba no se cobra las horas por deber,
lo hace por adicción a malgastarlas con una colonia
que a su razón le hace las veces de cloroformo.
Alba no escapa de la jaula para sentir la libertad
siente la verdadera libertad entre rejas
con un columpio para dos periquitos en el centro.
Alba no paga deudas, se excita contrayéndolas,
si las paga es porque la moneda de cambio
bursatiliza en la bolsa del sexo.
Tampoco llora por ella, si en ella
no entras tú como unidad.
No es infiel a las cosquillas en la cama,
ni a los zumos de naranja en la cocina
y el sol de las 11 lamiendo sus piernas desnudas
que tu camiseta ancha dejan al deseo
mientras su deseo te lame entero con la mirada.
Dios sabe que si está casada con algo,
es con la tapa del retrete subida
o con renunciar a uno de los lados de la cama.
Y yo, que soy más libre cada día
y me dedico a abrazar la ausencia de una compañía
que me despierte con besos en la nuca,
ni soy Alba, ni quiero volver a serlo jamás.
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